El coronavirus ha sido lo peor que nos ha pasado en mucho tiempo. Muchas víctimas, mucho dolor y muchas secuelas…pero hoy quiero hablar de lo bueno que nos ha podido dejar el covid. Sí, porque gracias a él hemos aprendido una serie de cosas que se pueden quedar entre nosotros durante los próximos años, e incluso para siempre.
Higiene y limpieza
La parte más importante que hemos aprendido gracias a este maldito bicho es que la limpieza es fundamental en nuestras vidas. Ya suena lejano pero era llamativo cuando a principios de la pandemia nos decían que una forma de evitar el contagio era lavarnos las manos. Y ahora se ha comprobado que es así. Gracias al covid sabemos que tenemos que lavarnos las manos, que tenemos que mantener una limpieza tanto en casa como en la oficina. Por ejemplo, ya no pueden faltar los geles desinfectantes en todos los trabajos. Incluso la famosa alfombra impregnada con una solución higienizante o desinfectante, que como nos indican desde Stock Net Valles, forma una eficaz barrera contra la entrada de microorganismos. Todas las alfombras retienen la suciedad y la humedad depositadas en los zapatos y se pueden personalizar con el logo del cliente.
Las visitas inoportunas
Gracias al covid nos hemos dado cuenta que hay visitas que son muy inoportunas. Durante meses una de las normas era que no se podía visitar casas ajenas, y la verdad es que muchas personas respiraron. Sobre todo, y es un ejemplo personal, se evitan las visitas cuando eres padre, que siempre vienen a molestar. De esta manera, con la excusa de que al niño no se le puede contagiar, pues nos evitamos tener que aguantar a esos amigos pesados que llegaban a una hora pero no sabían cuando se tenían que ir.
Limpieza en los bares
Los bares han sido los grandes damnificados en esta pandemia. Se les ha impedido abrir porque el ocio pensaban que era muy contagiador. Han tenido que hacer reformas y poner muchos inventos para poder evitar los contagios. Sin embargo, hay algunos aspectos que se tienen que quedar para siempre. Por eso, eso de que tengan que limpiar siempre la barra, la mesa o los baños. Y es que muchas veces llegabas a una terraza y te quedabas pegado, o lo mismo pasaba con los codos en las barras.
La cita previa
También ha sido muy usada la cita previa. Por ejemplo para algunos aspectos viene muy bien porque te evitas de tener que esperar molestas colas. Son muchas las horas que pasamos en las colas y así nos lo evitamos. La cita previa puede venir muy bien para los restaurantes, para la peluquería o incluso para los bancos. Eso sí, donde ha creado mucha polémica es en la Sanidad, sobre todo por la llamada telefónica. Ya que pedías la cita previa y te llamaban por teléfono. Para gente joven puede venir muy bien porque dominan las nuevas tecnologías, pero para los más mayores, y sobre todo en lugares rurales, supone un importante contratiempo.
Ayudar a los demás
Si algo ha florecido durante esta pandemia es la solidaridad. La gente no podía salir de sus casas y los vecinos les echaban una mano. Pues bien, ahora podemos ir más allá de apoyar a nuestras vecinas y vecinos y tomar la decisión colectiva de brindar seguridad a las personas sin hogar o que están desplazadas. Esta crisis ha abierto los ojos a mucha gente sobre la fragilidad de las circunstancias ajenas, destapando las desigualdades que han dejado a tantas personas con necesidad urgente de refugio y asistencia médica.
El comercio electrónico
El confinamiento multiplicó las ventas online en comercios de todo tipo, no solo supermercados, también tiendas de electrónica o de ropa. Pues bien, esta es otra de las cosas que seguro que han venido para quedarse. Y esto viene muy bien para las personas mayores y para los que tienen la agenda muy cargada. Es la mejor forma de tener una extensa lista de la compra en la misma casa en solo un día. Te evitas tener que ir al supermercado, evitar colas y cargar y descargar la compra.
Durante la pandemia, empezamos a vernos con los nuestros a través de una pantalla. Se evitaron los besos, los abrazos y los contactos. Pues bien, nos vamos a poder evitar de tener que dar besos siempre que nos vemos. Algo muy español y que yo no acabo de entender.
Pues bien, estas son algunas de las cosas que hemos aprendido del covid y que espero que sigan presentes en nuestra sociedad. ¿Qué te parece?